Los gestos sutiles de un capitán a menudo pueden marcar la diferencia, y Kylian Mbappé probablemente recordará este momento con cariño. Después de que Luka Modric levantara la Copa Intercontinental en Doha, escaneó el equipo en busca de alguien especial. Sus ojos se fijaron en Mbappé y se acercó a la estrella francesa para pasarle el trofeo. Aunque puede que no tenga el prestigio de una Copa del Mundo, simbólicamente ayudó a sanar algo del dolor que Mbappé sintió en ese mismo escenario durante la final de la Copa del Mundo. El número 9 levantó con orgullo su segundo título con el Real Madrid (dos finales, dos goles) y continuó su recuperación mental de manera espectacular. Más tarde, Mbappé le entregó el trofeo a Eduardo Camavinga, otro francés que soportó recuerdos difíciles en Lusail. Camavinga, sin perder el ritmo, convirtió el momento en una celebración lúdica, a la que pronto se unieron todos sus compañeros de equipo.
********************************************************
Ya puedes descargar la App Madridista News gratis en Apple Store y Google Play.
Puedes seguirnos en Facebook aquí.
Puedes seguirnos en X (Twitter) aquí.
Puedes seguirnos en Instagram aquí.
Puedes suscribirte a nuestro canal de YouTube aquí.
Puedes seguirnos en Telegram aquí.
Puedes seguirnos en TikTok aquí.
Puedes unirte a nuestro canal de WhatsApp aquí.