A la incorporación de Ricardo Zamora le siguieron poco después las de Ciriaco y Quincoces. Todos ellos conformaron la mejor defensa del mundo. La consecuencia, cuatro títulos (dos de Liga y dos de Copa) en cuatro años. Nacía el germen de un Madrid ganador, pero el estallido de la Guerra Civil truncó ese triunfalismo.
ZAMORA, ELEVADO A LA CATEGORÍA DE MITO
El extraordinario auge que el fútbol estaba adquiriendo en España provocó que algunos futbolistas comenzaran a ser auténticos ídolos. El ejemplo más claro se pudo comprobar en la portería del Real Madrid. La final de Copa de 1936 elevó a los altares a un Ricardo Zamora que se convirtió en el gran artífice del triunfo blanco ante el Barcelona. Su parada ‘imposible’ a tiro de Escolá es recordada aún en todos los libros de historia del fútbol español.
ASAMBLEA PARA LA RECONSTRUCCIÓN (1939)
Pedro Parages convocó el 19 de abril de 1939 una asamblea para tratar la situación en la que había quedado la entidad tras la Guerra Civil. Un estadio destrozado, una plantilla muy mermada… El panorama no era nada alentador. Se nombra a Adolfo Meléndez como nuevo presidente y el Real Madrid afronta una reconstrucción prácticamente desde cero.